Qué es el Trauma complejo. Características y consecuencias

Qué es el Trauma complejo

El trauma complejo es la consecuencia de una suma de vivencias que implican un elevado nivel de estrés y se producen de manera reiterada en el tiempo.

La persona que desarrolla un Trauma complejo sufre una alteración general como consecuencia de la acumulación de un daño percibido. Dicho daño puede producirse a través de dos tipos de vivencia:

• Convivir durante un extenso periodo de tiempo en un entorno traumatizante, lo cual, hace que se desarrolle sintomatología como consecuencia de la acumulación de daño.
• Se produce una acumulación de daño como consecuencia de experimentar distintos eventos traumáticos en diferentes momentos vitales.

Cabe señalar que, el haber vivido sucesos altamente estresantes a lo largo del tiempo no genera en todos los casos un trauma complejo. Hay personas que a pesar de sus difíciles vivencias no desarrollan un trauma.

En otras palabras, las experiencias de vida complejas no van de manera inherente asociadas a su desarrollo. En esta línea, Van der Hart sostiene que para que se desarrolle una experiencia traumática deben confluir dos factores:  la vivencia objetiva y subjetiva del suceso.

 

4 Características del Trauma complejo

1. Tiene naturaleza interpersonal: puede ser en forma de abuso sexual, maltrato físico, abandono o negligencia emocional.
2. Las situaciones de estrés grave tienen una duración prolongada en el tiempo.
3. Los eventos generadores de trauma comienzan antes del desarrollo de la etapa adulta.
4. Por último, genera en la persona consecuencias graves en sus diferentes áreas de funcionamiento. No pudiendo explicarse sus síntomas desde el diagnóstico de Trastorno de estrés postraumático simple.

 

¿Existe el diagnóstico de Trauma complejo?

El Trauma complejo no está recogido dentro de los manuales diagnósticos y, por lo tanto, no es susceptible de ser diagnosticado.

El origen de este concepto se remonta muchos años atrás, cuando los expertos que trabajaban con personas que habían pasado por vivencias traumáticas, veían que sus pacientes desarrollaban unos síntomas que no se podían explicar desde el diagnóstico de Trastorno de estrés postraumático.

Recientemente, en el año 2018, la CIE 11 incluyó en su manual diagnóstico una nueva categoría. El llamado trastorno de estrés postraumático complejo o TEPT complejo (6B41). Esta nueva categoría diagnóstica responde a la necesidad de poder dar relevancia diagnóstica a pacientes que presentan sintomatología compatible con el Trauma complejo.

 

Consecuencias del TEPT complejo

Cuando una persona desarrolla un trauma complejo, se ven afectadas múltiples áreas de su funcionamiento vital. Como consecuencia, aparecen una serie de síntomas que repercuten en su actividad diaria y, en general, en la forma de relacionarse con ellas mismas y con el mundo.

En la actualidad, existe consenso entre expertos en señalar cuáles son los síntomas más comúnmente presentes entre las personas que desarrollan un Trauma complejo. Dichos síntomas, pueden dividirse en 6 grupos de alteraciones:

1. Regulación emocional y conducta impulsiva

   Son habituales los problemas asociados a la  regulación de las emociones, entre otras, la mala regulación del enfado que suele desencadenar en estallidos de ira. Por otro lado, puede haber presencia de conductas autodestructivas, por ejemplo, son habituales las conductas autolesivas. A su vez, hay tendencia a responder de forma excesivamente intensa ante los estímulos. Por ejemplo, pueden sentir un miedo elevado ante situaciones objetivamente inofensivas. Por último, pueden verse involucrados en conductas que suponen un riesgo para su integridad física y psicológica.

2. Atención y estado de conciencia

   Sufren alteraciones en la atención,  presentando dificultades para concentrarse, entre otras. A su vez, suelen ser habituales los episodios de disociación, despersonalización y amnesia.

3. Autoconcepto

   Las personas que desarrollan un trauma complejo sufren alteraciones en la manera que tienen de percibirse, generándoles un daño en su autoestima. Por otro lado, conviven de forma habitual con la culpa, responsabilidad y vergüenza. Por último, tienden a minimizar su contexto traumático, así como, a pensar que no van a ser comprendidos.

4. Relaciones interpersonales

   Les resulta difícil confiar en los otros, presentan mayor riesgo de volver a ser víctima y/o de victimizar a los demás.

5. Síntomas somáticos o desarrollo de problemas médicos

   Son muy habituales las quejas sobre dolencias físicas para las que no se encuentra una causa biológica. Asimismo, presentan una incidencia alta de enfermedades médicas.

6. Sistema de significado

Por último, estas personas suelen tener una visión de futuro pesimista y catastrofista. Es habitual que sientan desesperanza. A su vez, desarrollan indefensión aprendida, la cual, les lleva a pensar que carecen de control alguno para poder enfrentar las situaciones adversas que se les presentarán en la vida.

 

Bibliografía

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Van der Kolk, B. y Fisler, R. Dissociation and the fragmentary nature of traumatic memories.http://www.trauma-pages.com/vanderk2.htm ,2001