Superar una ruptura amorosa puede representar distintas realidades para diferentes individuos. A este respecto, cabe señalar que dependiendo de las características de la relación, el estilo de apego de cada miembro de la pareja, etc. el impacto de la separación puede variar de unos casos a otros.
No obstante, la ruptura de pareja está considerado como un evento estresante, el cual, genera una repercusión concreta en cada persona y, por lo tanto, requiere en todos los casos de una adaptación para poder superar la ruptura amorosa.
Algo presente en toda ruptura es el proceso de duelo que se inicia tras la separación. Principalmente, está presente la emoción de tristeza y, en ocasiones, se pueden encontrar síntomas de ansiedad. Sin embargo, es necesario transitar por este proceso para poder elaborar adecuadamente la pérdida y sanar.
No obstante, son muchas las variables que median en cómo podemos sentirnos después de una separación. Algunas de ellas las exponemos a continuación:
- Características de personalidad.
- Apoyo social percibido.
- Estrategias de afrontamiento individuales.
- Estilo de apego.
- Motivo de ruptura.
- Atribución causal de la separación.
- Cambios vitales derivados de la ruptura. Por ejemplo, mudanza, cambios en el poder adquisitivo, etc.
¿Cómo se vive una ruptura?
En la psicología se ha observado que «cada individuo es único en cómo afronta la ruptura o el desenlace«.
Por ejemplo, Sarah Seraj y su equipo de investigadores de la Universidad de Texas en Austin llevaron a cabo un estudio que analizó 1.027.541 publicaciones y los comentarios de 6,803 usuarios de la red social Reddit, específicamente en el tema r/Breakups. Estos usuarios fueron seleccionados por haber publicado comentarios tanto sobre sus relaciones sentimentales como sobre temas cotidianos en la plataforma.
Los investigadores detectaron que su expresión reflejaba las repercusiones emocionales y cognitivas de una ruptura.
El estudio evidenció diferencias en el lenguaje incluso en foros no directamente vinculados con las relaciones, mayormente entre 6 meses y un año después de la separación:
- Aumento del uso de palabras en primera persona singular (p. ej., «yo«), indicativo de una fuerte concentración interna y, en ocasiones, depresión.
- Las primeras palabras en plural («nosotros«) fueron empleadas principalmente en publicaciones por individuos que aún intentaban comprender a sus exparejas, pero desaparecieron con el tiempo.
- Palabras de procesamiento cognitivo como «comprendo«, «porque» y «debería» o «tendría que» surgieron con mayor frecuencia tras la ruptura, cuando los usuarios procuraban dar sentido a los cambios en sus vidas e identidades.
- El estilo del lenguaje cambió de analítico, mayormente a personal e informativo.
Este estudio ilustra que una ruptura puede conllevar un cambio temporal pero significativo en el pensamiento, ya que muchas personas se esfuerzan por comprender y explicar su ruptura, tanto a sí mismos como a otros.
Las 5 etapas de una ruptura
El duelo se inicia tras la pérdida del vínculo o relación con la otra persona. Como se ha señalado anteriormente, dos de las respuestas más habituales presentes en una ruptura amorosa son la tristeza y la ansiedad.
Una autora que contribuyó al estudio del duelo fue la psiquiatra Kubler-Ross. Su modelo explica el duelo como un proceso compuesto por 5 etapas, las cuales, debemos atravesar hasta superar la pérdida.
No obstante, cada persona transita por el duelo de manera diferente y este proceso no debe entenderse como algo rígido, por el contrario, es natural que sufra cambios en función de la persona y el momento en el que se encuentre.
Rechazo o negación
En esta etapa es natural que aún no puedas aceptar que la ruptura haya ocurrido realmente. Es decir, no conectas con la pérdida, ni cognitiva ni emocionalmente.
La negación, es una etapa natural en un duelo y su función es concederte un tiempo para asimilar el impacto de la pérdida de vínculo. No necesariamente implica que distorsionarás la realidad de forma permanente.
Enojo o ira
La fase de enojo puede generar sentimientos de enfado y frustración. Estas emociones pueden dirigirse hacia uno mismo o hacia la expareja.
En esta etapa se buscan factores causales de la ruptura. Es importante cuidar el no dirigir este enfado hacia las personas que pueden estar apoyándonos a sostener estos difíciles momentos.
Negociación
Esta etapa puede implicar el procesamiento cognitivo de los acontecimientos de la relación, en otras palabras, «reflexionar» sobre lo ocurrido y tratar de cambiarlo. Es habitual que se asiente una esperanza de reconciliación. En la negociación se fantasea con los cambios que podrían hacerse para que la relación continuara.
Depresión
En esta etapa se conecta con el dolor, ya que, se asume la realidad de la pérdida de vínculo. En esta etapa, la depresión puede manifestarse con los siguientes síntomas:
- Cambios de apetito.
- Sensación de vacío.
- Dificultades para dormir.
- Exceso de sueño.
- Deseo de aislamiento.
- Intenso anhelo por la ex pareja.
- Preocupación por el pasado.
Esto puede formar parte del proceso de duelo. Sin embargo, si los síntomas persisten más de lo habitual, empeoran con el tiempo o hay pensamientos suicidas, se debe buscar ayuda profesional.
Aceptación
Esta etapa se asocia con encontrar calma a pesar del dolor generado por la ruptura. La aceptación permite mirar con mayor perspectiva lo que ha supuesto la separación. A su vez, plantea pensamientos más dirigidos a futuro y no tan anclados en el pasado como en el resto de etapas.
Cómo sobrellevar una ruptura difícil
Un estudio longitudinal y multivariado realizado en 2018 entre adultos jóvenes, sus parejas y amigos encontró que adoptar una perspectiva optimista puede convertir una ruptura en una experiencia de crecimiento personal. Puede que te sientas mejor si intentas pensar en tu ruptura y tu relación pasada como:
- Una experiencia que puede servir como lección para una relación futura.
- Una fuente de reflexión sobre lo que te gustaría evitar.
- Una oportunidad para encontrar nuevas formas de crecer fuera de la relación.
Cuando estés en el proceso de superar una ruptura amorosa, puede ser útil hacerte algunas preguntas sobre tu próxima relación, como por ejemplo:
- ¿Qué deseas en tu próxima pareja?
- ¿Cuáles son algunas de las cualidades positivas de tu ex pareja que te gustaría que tuviera tu próxima pareja?
- ¿Quieres abordar tu próxima relación de manera diferente?
Siempre es bueno buscar apoyo
Durante tu reflexión, es beneficioso buscar apoyo emocional en las personas de tu entorno y, de ser necesario, acceder a apoyo psicológico.
¿Cuánto tiempo llevará superar una ruptura amorosa?
Así como cada ruptura es diferente, la recuperación también es única para cada individuo. Por lo general, la curación necesaria después de terminar una relación importante puede tardar entre 1,5 y 3 años.
Según un estudio sobre rupturas, el promedio oscila entre 6 meses y 2 años en recuperarse. Otros tardaron hasta un año, posiblemente porque se quedaron anclados en ciertas etapas del duelo, rumiando sobre el pasado.
Cada persona necesitará un período de tiempo diferente para recuperarse tras una ruptura dolorosa. Si te sientes estancado o si estás tardando más de lo que consideras apropiado, puede ser útil buscar ayuda de un terapeuta.
Recuperación tras la ruptura
Superar una ruptura puede ser muy complejo pero es posible. Y si bien diversos factores pueden influir en tu respuesta a una ruptura, la experiencia de cada persona es única. Dado que una separación implica una pérdida emocional y cambios significativos en tu vida social y personal, es necesario que se produzca una adaptación a tu nueva realidad.
Por un lado, se debe dejar espacio para vivir lo asociado al proceso de duelo. Y, por otro lado, es también importante dedicar tiempo a aquello que te haga sentir mejor. A continuación, dejamos algún ejemplo de actividades que pueden ayudar en ese periodo:
- Explorar nuevos hobbies.
- Lectura.
- Dedicar tiempo a aquello que nos gustaba hacer.
- Conocer gente nueva.
- Apoyarte en personas cercanas.
Pero otra forma de superarlo, es acudir a un psicólogo o psicóloga. Esto también puede ser muy beneficioso para superar tu ruptura amorosa. Con tiempo y paciencia, podrás volver a disfrutar de la autonomía, el apoyo e incluso establecer una nueva relación. Pero si están en la fase de intentar solucionarlo, también puedes trabajar la terapia de pareja con psicólogos especialistas en este área.