Son las 20h y llevas todo el día trabajando. Enciendes la luz de la mesilla de la sala, te pones cómod@ y sigues leyendo ese libro que consigue transportarte a otra realidad; abstrayéndote del estrés acumulado durante el día.
Venimos a hablar de la lectura profunda. Este tipo de lectura es pausada; sin prisas por encontrar el párrafo en el que aparezca lo que buscamos. Trata de empezar y terminar un texto, sin saltarnos líneas; sin saltar a otras cosas mientras lo estamos haciendo, por ejemplo a las siempre «oportunas» notificaciones del móvil.
Hoy, la neurociencia sabe que no es cierta la creencia de que podamos hacer dos cosas a la vez (la multitarea). Nuestro cerebro en estas situaciones, va cambiando el foco de atención de una tarea a otra, produciendo pérdidas cognitivas en el proceso.
Distintos estudios afirman, que los beneficios de realizar una lectura profunda son múltiples: desarrolla la imaginación, la reflexión y el pensamiento crítico, la capacidad deductiva,así como, ayuda a enriquecer el vocabulario.
Pero este tipo de lectura parsimoniosa e inmersiva, tal y como indican los expertos, es una capacidad entrenable y en caso de no ejercitarla, se pierde.
Patricia Greenfield, reputada psicóloga y profesora estadounidense señala:» Ahora se dedican menos tiempo y atención a procesos de lectura más parsimoniosos. Lo que subyace, es la incapacidad de numerosos estudiantes para leer con un nivel analítico suficiente y comprender la complejidad del pensamiento o el hilo argumental en textos densos.»
Los problemas de lectura están relacionados con el fracaso y el abandono escolar; y hoy en día, son muchos los niños y adolescentes que refieren no entender lo que leen.
Pero la importancia de la comprensión lectora no se limita a las aulas. En nuestro día a día debemos ser capaces de entender una carta del banco, un aviso del jefe, un contrato laboral…
Desarrollar un buen hábito de lectura es una tarea que tenemos pendiente; y una manera de adiestrar al cerebro es leyendo por placer, afirma la neurocientífica Maryanne Wolf.